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Silves es una ciudad del interior del Algarve a orillas del río Arade. Fué además. la capital de la región.
Tiene amplia historia, con buena cuenta de batallas entre reyes portugueses y musulmanes. De aquellos tiempos y bien conservado, nos queda uno de los puntos más interesante de la ciudad: su castillo.
La panorámica de la ciudad desde la orilla sur del río Arade ofrece una imagen bucólica de casas blancas, bajo los muros encalados de la Catedral y el color rojo oscuro del castillo.
Cruzando el puente romano se llega al paseo principal de la ciudad, a orillas del río. Desde este punto las calles ascienden poco a poco con recorridos peatonales hasta llegar a las puertas de la ciudad antigua. A poca distancia estaremos en la Se y el Castillo, ambos situados muy próximos.
En esta zona esta situado el Museo Arqueológico de Silves, que conserva restos de las diferentes etapas de la historia de la ciudad.
Breve Historia
Los primeros pobladores de Silves datan del paleolítico, siendo luego los cónios y los celtas quienes lo poblaron.
Bajo dominio romano, la ciudad recibe el nombre de Cilpes. Tras la caída del Imperio Romano, Silves se unió al reino de los visigodos en el siglo V d. C.
En 1189, D. Sancho I conquistó a Silves de los musulmanes y ya en 1249 durante el reinado de D. Afonso III, los portugueses conquistan la ciudad.
Castillo de Silves
Silves se encuentra en lo más alto de una colina, sobre el que destaca el castillo, que fue construido por los árabes en el siglo XI. Hoy es uno de los castillos mejor conservados de Algarve.
El interior del castillo es visitable, ofreciendo hermosas panorámicas sobre Silves. En el interior hay una cisterna de 5 metros de profundidad y una estatua en honor a Sancho I. Desde la muralla es posible ver la Porta da Traição o Puerta de la Traición.
Catedral Sé de Silves
La Catedral Sé está muy cerca del castillo, construida en tonos rojos característicos de la región de Algarve. Se construyó en 1189 sobre una antigua mezquita. Después del terremoto de 1755, la catedral fue restaurada varias veces.
El interior tiene tres naves y un encabezado tripartito. La Capilla de São João de Rego, de estilo gótico, se encuentra debajo de la torre, en honor a João Rego, uno de los grandes colonizadores de Madeira.
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