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Sitio de interés

Monasterio de Yuso y Suso en San Millán de la Cogolla




Contenidos del artículo

Declarado Patrimonio Mundial por la Unesco de tipo Cultural en 1997.

Fundado por San Millán a mediados del siglo VI se convirtió en un lugar de peregrinación. En honor al santo se edificó esta iglesia románica que se conserva aún en Suso.

Se dice que fue la cuna de la lengua española, hasta llegar a ser uno de los idiomas más hablados del mundo.

A principios del siglo XVI, la comunidad se instaló en un terreno situado debajo del antiguo monasterio y edificó el nuevo y bello monasterio de Yuso, donde todavía prosigue sus actividades.

El monasterio fue construido en estilo románico, como correspondía a la época. Es demolido en su totalidad y reconstruido en el siglo XVI, en estilo herreriano, de los siglos XVII y XVIII.

Los códices y cantorales de San Millán
El monasterio atesora también uno de los bienes culturales más importantes de España, San Millán de la Cogolla. En este lugar nació el idioma que hoy en día hablan 400 millones de personas: el español. Las primeras palabras que se conocen del castellano, las llamadas Glosas Emilianenses, se escribieron en los majestuosos monasterios de Yuso y Suso, declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Pasear entre los muros de estos edificios es sentirnos parte de la historia, una sensación que no se puede explicar, solo vivir.

A solo 40 kilómetros de Logroño, escondido entre montañas, se encuentra San Millán de la Cogolla. Su origen se remonta al siglo VI, cuando el santo buscó refugio en una ermita excavada en la roca. Allí nació una tradición monástica que, en la Edad Media, haría del lugar uno de los focos culturales más importantes del sur de Europa. Muchos peregrinos aún se desvían de la Ruta Jacobea para visitar este típico caserío riojano, convertido con el tiempo en el conjunto monástico de Suso y Yuso. Ambos se inscriben en la Ruta de la Lengua Castellana, que une San Millán de la Cogolla con otras localidades que tuvieron un papel decisivo en la evolución del latín vulgar, como Santo Domingo de Silos, Valladolid o Salamanca.

Portada barroca y Salón de los Reyes
Se accede al interior por una puerta barroca del siglo XVII que lleva columnas corintias y un relieve de San Millán a caballo. Es obra del arquitecto Pablo de Basave y del escultor Diego de Lizarraga. Desde el vestíbulo se entra al Salón de los Reyes. Recibe este nombre por los cuatro lienzos de reyes bienhechores del monasterio. Los escudos de la Escalera Real son los de la Abadía y los de Castilla. Están fechados en 1697. Es la última gran construcción de los abades benedictinos. En esta sala se encuentra la reproducción del códice 60 y del folio 72 recto en el que están escritas las Glosas Emilianenses.


Claustro procesional. Monasterio de Yuso.
El claustro de la planta baja también se conoce por el nombre de procesional. Comienza su construcción Juan Pérez de Solarte en 1549. Es renacentista con bóvedas góticas. Arcos apuntados, doblados, entre contrafuertes rematados por pináculos góticos con ganchos, poco esbeltos y de labra tosca. La puerta que comunica con la iglesia, decorada al estilo manierista, es obra del italiano Andrés de Rodi. Está fechada en 1554 y nos da una idea de la decoración que tenían pensada para el resto del claustro bajo, y que no llegó a ejecutarse.

El de la planta alta es clasicista. Columnas toscanas, adosadas a pilares, con friso de triglifos, metopas y capiteles adornados con tres rosetas y molduras de ovas en el equino. Está decorado con veinticinco cuadros de José Bejes que narran los distintos milagros de San Millán, según la biografía de San Braulio, obispo de Zaragoza.

La iglesia
La iglesia es de tres naves, con bóveda estrellada y un bonito cimborrio. Se comenzó en 1504 por mandato del abad Fray Miguel de Alzaga y se termina treinta y seis años después. Gótico decadente. La iglesia era para uso de los monjes, por eso la parte delantera, desde el coro central, pasando por el presbiterio hasta el relicario, estaba destinada solo para ellos. La parte trasera, desde el trascoro hasta la puerta, era la zona que usaba el pueblo cuando éste podía acceder al templo. Son dos espacios litúrgicos dentro del mismo edificio.

La sillería del coro bajo fue realizada por un tallista flamenco, Matero Frabricio, en torno a 1640, siguiendo las trazas y modelo diseñado por un monje de San Juan de Burgos. Tiene un retablo del siglo XVII con pinturas también de fray Juan Ricci; el cuadro central representa a San Millán en la batalla de Hacinas (Burgos) contra los moros. Los cristianos, en sus luchas contra los musulmanes, eligieron a San Millán como patrono y así, Gonzalo de Berceo en su Vida de San Millán nos cuenta la promesa de los votos legendarios, de una parte Ramiro II de León a Santiago y de la otra, Fernán González a San Millán.

Era la zona destinada al pueblo. El trascoro es a la vez el retablo parroquial y puerta de acceso a través del coro al altar mayor. El trascoro, obra de Francisco de Bisou realizada en 1767, de estilo rococó francés, está decorado con esculturas de bulto redondo, probablemente del taller de Pascual de Mena, que representa a los santos que se mueven en torno a San Millán: San Braulio, su biógrafo, San Felices, patrón de Haro y su maestro, San Aselo, San Geroncio, San Citonato, San Sofronio, Santa Potamia, discípulos, y Santa Oria.

En esta zona hay también un púlpito plateresco, de finales del XVI. Los mediorelieves representan a los cuatro evangelistas.

En el oratorio se pueden contemplar las réplicas de las arcas relicarios del San Millán (siglo XI) y su maestro San Felices (siglo XII). La de San Millán fue un encargo de Sancho IV de Navarra (Sancho el de Peñalén), en el año 1067.

Sacristía
Es una de las sacristías con más alto valor artístico de España. En un principio fue la sala capitular. Arquitectónicamente es del s. XVI. Empieza a usarse como sacristía a finales del siglo XVII, época de la que es casi toda la pintura que podemos contemplar. Los frescos del techo y las mesas centrales son del XVIII. El abad Fray José Fernández (1693-1697) la adorna con doce cobres que están sobre la cajonería de nogal. La colección de cobres se completa hasta llegar a los veinticuatro. La enriquece también con cuatro grandes lienzos que traen desde Nápoles. El retablo, barroco, está presidido por una talla de Nuestra Sra. Reina de los Ángeles con cetro y corona.

Refectorio
El refectorio mayor, el comedor de los monjes, empieza a ser construido en 1580. Decorado con una portada dórica, asientos con pilastras jónicas estriadas y púlpito. Para su realización se contrató al ensamblador Juan de Iriarte en 1597. Las catorce mesas se realizan en 1608. El mobiliario se conserva completo.

Salón de la Lengua
Inaugurado en 1977 con motivo de las celebraciones del Milenario de la Lengua Castellana, hoy es el lugar emblemático del monasterio. Está decorado con todos los escudos y banderas de los países hispanos y de Filipinas por las embajadas correspondientes, además de un busto de Gonzalo de Berceo, primer poeta de las letras españolas y notario de este monasterio. En este salón se realizan los actos oficiales y las conferencias relacionadas con el castellano.

Hotel
Dentro de una de las alas del monasterio se encuentra uno de los hoteles con más encanto de La Rioja. Hostería San Millán, un hotel con 25 habitaciones que ofrece actividades relacionadas con la cultura del monasterio y el enoturismo

Puntos de interés

Información para las visitas


Más información

Sitio Web del monasterio de Suso y Yuso

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Acceso al monasterio de Yuso

Acceso al monasterio de Yuso

Los códices y cantorales de San Millán

Los códices y cantorales de San Millán

Los códices y cantorales de San Millán de la Cogolla

Los códices y cantorales de San Millán de la Cogolla

Manuscrito

Manuscrito

Vidriera

Vidriera

Arca relicario de San Millán de la Cogolla

Arca relicario de San Millán de la Cogolla

Cúpula de iglesia

Cúpula de iglesia

Libros manuscritos

Libros manuscritos

Maqueta del monasterio de Suso

Maqueta del monasterio de Suso

Maqueta Monasterio de Yuso

Maqueta Monasterio de Yuso

Acceso al monasterio de Yuso

Acceso al monasterio de Yuso

Puerta de acceso al claustro de Yuso

Puerta de acceso al claustro de Yuso

Patio interior

Patio interior

Sillería de coro

Sillería de coro

Visita de grupo

Visita de grupo

Torre iluminada al anochecer

Torre iluminada al anochecer

Claustro del monasterio de Yuso

Claustro del monasterio de Yuso

Vista del claustro

Vista del claustro

Recuerdo de las Glosas Emilianenses, primeras palabras en español

Recuerdo de las Glosas Emilianenses, primeras palabras en español

Sacando un cantoral para el oficio

Sacando un cantoral para el oficio




“No he fracasado. He encontrado diez mil formas que no funcionan”. – Thomas Edison

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